¿Qué
significa contristar al Espíritu Santo de Dios?
¿Cómo contristamos al
Espíritu Santo de Dios?
El Espíritu Santo es
la persona Divina que Dios envió para que esté con nosotros y en medio de
nosotros.
El Espíritu Santo de
Dios es eterno, es omnisciente, es omnipresente y omnipotente; es conocido en
la Biblia como el Espíritu de verdad, de vida, de fe, de amor, de poder, de
sabiduría, de gracia, de gloria y obviamente como el Espíritu de Dios.
El Espíritu Santo
enseña, testifica, convence, conduce, entiende, habla, anuncia, consuela, guía,
santifica, purifica, anima, aconseja, ora por nosotros y obra continuamente
para conformarnos a la Imagen de Jesucristo el Hijo de Dios.
El Espíritu Santo es
el agente encomendado por el Padre para santificar al creyente, es pues el Espíritu
santificador directamente contristado o entristecido cuando pecamos, cuando desobedecemos
la voz de Dios.
El Espíritu Santo
limpia, decora y embellece el espíritu del creyente; es por tanto que todo
pecado se convierte en una mancha corrompida que afea su obra en el creyente.
Pecando entristecemos
al Espíritu Santo, y como no se va a entristecer al ver manchada, afeada,
echada a perder la obra que viene llevando a cabo en cada uno de nosotros.
Es como cuando te
dedicas a limpiar tu casa, ordenarla y a decorarla y alguien de un momento a
otro llega a desordenarla y a ensuciar todo, lo más común es que sintamos que
perdimos el tiempo, que todo el trabajo se echó a perder.
Lo mismo sucede
cuando hacemos cosas que manchan nuestras vestiduras y que manchan la obra de
santificación y purificación del Espíritu Santo en cada uno de nosotros.
El Espíritu de Dios
continuamente trabaja para que estemos delante de Dios sin mancha, sin arruga y
sin ningún tipo de contaminación; y a medida que nosotros nos mantenemos fieles
a Dios facilitamos su obra y termina reflejándose en cada uno de nosotros su
labor continua.
¿Qué cosas
puntualmente entristecen al Espíritu Santo?
Toda desobediencia,
toda obra pecaminosa, todo pensamiento y palabras deshonestas, corrompidas,
hirientes, ofensivas y malintencionadas.
Al Espíritu Santo de
Dios; le entristece que andemos como los que no conocen a Dios, que andemos
conforme al viejo hombre, que hablemos mentiras y que nos airemos
descontroladamente hasta pecar.
Entristece especialmente
al Espíritu Santo aquel vocabulario que no concuerda con nuestra profesión de
fe; debe entonces cada creyente cuidar de cada palabra que dice y como la dice,
la intención con que la dice y a quien la dice, pues no hay momento en que el Espíritu
Santo se separe de nosotros y nunca deja de obrar, esperando que el mundo vea
su obra en los hijos de Dios.
En Efesios cap. 4
versículo 31 y 32 dice: Quítense de vosotros
toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes
sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como
Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Como evito contristar
al Espíritu Santo:
1.
Comprometámonos
fielmente a obedecer la voz de Dios.
2.
Reconozcamos
siempre su presencia en nosotros y en medio de nosotros.
3.
Confesemos
nuestro pecado y arrepintámonos, cambiando nuestro modo de pensar y nuestro
comportamiento, para que sea conforme a la Palabra de Dios. Pidamos siempre al
Espíritu Santo que nos guíe e ilumine para estar en armonía con Él.
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ejemplar en formato PDF es que sirva para tu propio uso, o para que lo
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Me ayudo en saber esto Dios siempre los guie
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