miércoles, 5 de junio de 2019

7 cosas que Dios nunca dejará de hacer por ti.


Dios te bendiga grandemente.

El Salmo 104:24 dice:
¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová!
Hiciste todas ellas con sabiduría;
la tierra está llena de tus beneficios.

¡Cuántas cosas ha hecho Dios por nosotros, cuántas hará y cuántas seguirá haciendo!

No sé si te has puesto a pensar si realmente mereces todo lo que Dios te da, o tal vez seas de aquellas personas que creen que por lo dura que ha sido la vida con ellos han llegado a la conclusión de que Dios no les ha concedido ningún beneficio.

Dios siempre ha estado haciendo cosas a nuestro favor y si Él se pusiera a contarlas se multiplicarían más que la arena del mar. Sin embargo, para su gloria y su honra, hoy conoceremos 7 cosas que Dios nunca dejará de hacer por nosotros.

Lo PRIMERO que veremos, es que, Dios no dejará de trabajar hasta terminar lo que comenzó en nuestras vidas.

Filipenses 1:6 dice:
Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.

Todos hemos sentido alguna vez que no hay progreso en nuestra vida, pero déjame decirte lo siguiente: cuando Dios inicia un proyecto lo termina, Él nunca dejará de obrar y trabajar en nosotros hasta que cumpla su eterno propósito.

Dios obrará en ti y te ayudará a crecer hasta que complete el trabajo en tu vida. No hay nada que lo pueda detener, no hay nada que le pueda estorbar y no hay nada que le puede impedir terminar lo que comenzó.

No permitas que tu condición actual te robe el gozo de conocer más a Cristo y de crecer en el proceso de ser transformado a su semejanza.

Dios está involucrado en trabajar en cada aspecto de nuestra vida, confiemos en Él, su trabajo es perfecto y no lo dejara a medias ya que todo lo que Dios comienza lo termina.

1 Tesalonicenses 5:23-24 dice:
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.

Lo SEGUNDO que conoceremos, es que, Dios permanecerá siempre fiel.
2 Timoteo 2:13 dice:
Si fuéremos infieles, él permanece fiel; 
Él no puede negarse a sí mismo.

No hay nada más reconfortante para nosotros que pensar y saber que Dios es fiel, aunque nosotros muchas veces le terminemos siendo infieles, ya sea de manera consciente o inconsciente.

Toda la gloria sea para Dios, ya que nuestra incredulidad no puede hacer que Él rompa sus promesas. Toda tu duda e incredulidad, no ha hecho a Dios infiel a ti; así como tampoco la maldad ha sobrepasado su misericordia y aún todavía hace salir su sol sobre buenos y malos.

Evangelio de Mateo 5:45 dice:
Para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
Si la fidelidad de Dios dependiera totalmente de nuestra fidelidad a Él, nunca recibiéramos nada.

Dios es fiel, porque esa es su esencia; esa es su personalidad y así siempre será Él. Dios siempre cumple todo lo que ha dicho y ha prometido, y esta verdad, en vez de provocar en nosotros libertinaje, debe conducirnos a un profundo agradecimiento inspirado en la persona de Dios.

Santiago 1 :17 dice:
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. En otras palabras, Dios nunca cambia

Si Dios hiciera otra cosa aparte de lo que Él ha dicho, dejaría totalmente de ser quien es. Esta es nuestra gloria, EL GRAN YO SOY es auto existente e inmutable y no necesita de nada ni nadie para existir y ser quien es.

Lo TERCERO que conoceremos, es que, Dios nunca nos abandonará y estará con nosotros todos los días.
Evangelio de Mateo 28:20 dice:
Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. Esto es algo que el Señor nunca dejará de hacer.

Muchos se preguntarán: ¿De qué manera está Jesucristo con nosotros?

Aunque físicamente no lo esté como estuvo con los discípulos al principio, el Espíritu Santo viene a ser y a representar la persona de nuestro Señor Jesucristo en nosotros y en medio de nosotros.

Nuestro Señor Jesucristo continúa estando hoy con nosotros por medio de su Espíritu.

Muchos considerarán su presencia estática e inactiva, pero esto no es así. Su presencia sigue siendo poderosa e influyente como lo fue con los discípulos.

Qué bueno es que siempre haya uno que es el mismo y que no se vaya de nuestro lado.

El Señor es para nosotros esa ROCA que en medio del caer de la lluvia y del soplar de los vientos permanece inalterablemente segura.

Confía tus preocupaciones a Jesús quien nunca puede ser quitado de tu lado. Él dijo: “he aquí yo estoy con vosotros todos los días” y esto es suficiente para nosotros; por lo demás, que nos olvide quien quiera.

La presencia del Señor Jesús a nuestro lado enciende el corazón, trae fortaleza y seguridad y Él se deleita en estar con nosotros.
Él prometió estar con nosotros porque sabía que su presencia era lo que más íbamos a necesitar.

Lo CUARTO que debes saber, es que, si Dios te ama, te amará para siempre.

Efesios 3:19 dice:
Y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.

El Salmo 30:5 dice:
Porque un momento será su ira,
Pero su favor dura toda la vida.
Por la noche durará el lloro,
Y a la mañana vendrá la alegría.

La disciplina de Dios, un momento de necesidad y los tiempos de aflicciones nos parecen ser eternos, pero sin duda todo ello pasará; pero en comparación a esto ¿sabes que será para siempre?

El amor de Dios por ti y por mí es para siempre.
Todo pasará y cambiará, pero el amor de Dios jamás.
Personas vendrán y se irán, pero el amor de Dios permanecerá; nada lo cambiará ni lo afectará.

Te preguntas y ¿qué de mis faltas, pecados y defectos?

Déjame decirte lo siguiente:
Si para Dios amarnos fuera necesaria nuestra perfección, de seguro a nadie amaría.

1 Juan 4:10 dice:
En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.

El amor de Dios es y será para siempre.

Lo QUINTO que conoceremos, es que, Dios nunca nos dejará ser tentados más de lo que podemos resistir, Él siempre y gracias a su fidelidad nos dará una salida.

1Corintios 10:13 dice:
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

Al escuchar esto, muchos dirán: “no creo que Dios conmigo haya tenido ese cuidado, ya que lo que estoy viviendo es demasiado duro y no encuentro una salida”. Escucha lo que te diré:

PRIMERO. El texto dice: pero fiel es Dios… y Él cumplirá todo lo que ha dicho. Si Él ha dicho que dará una salida, Él la dará.

SEGUNDO. Dios sabe lo que podemos aguantar y cuánto tiempo lo podemos aguantar; quizás tú mismo te estés subestimando, pero Dios te conoce plenamente.

TERCERO. Los hombres pueden dejarnos y huir después de vernos agobiados y mal heridos, y a veces ellos mismos son los que nos han herido; pero Dios es fiel y no nos abandonará con tal de que dependamos de Él y no confiemos en nuestras propias fuerzas.

Lo SEXTO que debes saber, es que, si Dios te ha perdonado, nunca más se acordará de tus pecados.

Hebreos 8:12 dice:
Porque seré propicio a sus injusticias, 
Y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades.

Después de habernos arrepentido y habiendo confesado delante de Dios nuestros pecados, Él nos garantiza su perdón por medio de nuestro Señor Jesucristo

Al Dios perdonarte, Él olvida los pecados que ya te perdonó; en otras palabras, nunca más te juzgará por ellos.

Dios no exige dos pagos por una misma deuda. Cuando Dios perdona, el perdona y olvida; Él perdona y no señala. Por lo tanto, descansa en la gracia del perfecto perdón de Dios que durará para siempre.

Por último (7) Nuestro Señor Jesucristo nunca dejará de interceder y abogar por nosotros ante el Padre.

Hebreos 7:25 dice:
Por lo cual (Jesucristo) puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.

Cristo, como nuestro Sumo Sacerdote eterno, siempre será nuestro intercesor y abogado ante el padre celestial. Si confiamos en Cristo, no hay manera de fracasar; ya que, ante cualquier falta nuestra, Él de antemano tiene defensa preparada nuestro favor; y qué mejor defensa que su propio sacrificio el cual ha sido ya aceptó por Dios como ofrenda a nuestro favor.

Jesucristo por su intercesión continua y para siempre, nos da garantía de nuestro perdón, salvación, sanidad y ayuda para nuestra necesidad.
Él ruega e intercede por nosotros por siempre y para siempre que se necesite.

Pido a Dios para que estas verdades impacten tu corazón.



MIRA EL VIDEO👇


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

El versículo que debes conocer si le has fallado a Dios

Ministerio Oidores & Hacedores Por el pastor: Jaiver Caro El versículo que debes conocer si le has fallado a Dios Dios te be...